domingo, 16 de noviembre de 2014

Las emociones que siento a lo largo de estos días esperando un maldito mensaje de tu parte varían desde la pesada tristeza hasta una rabia inmensa que siento en estos momentos. 

Siempre he idealizado todo demasiado. No me importaba siempre que la decepción me la llevara porque yo sola construía mis castillos en el aire, me fastidiaba y punto, pero ahora que esos castillos se levantaron en base al trato que he recibido de tu parte, me siento la persona más estúpida y engañada del mundo. Quizás tú seas así, trates a todas por igual y para ti esto solo sea un juego de seducción. Quizás nunca lo vimos de la misma manera, aunque me cueste creerlo cada vez que recuerdo tu mirada y la enorme sonrisa que esbozabas al verme, quizás te mande a la mierda finamente y te quedas solo en tu estúpido juego.



sábado, 1 de noviembre de 2014

¿Vamos a perder el tiempo preguntando nos como pudo ocurrir? ¡Para mi lo raro sería que no sucediera nada entre tú y yo! Aún recuerdo la primera vez que tu mirada se clavo en la mía, en ese mismo instante, el mundo entero pareció desaparecer y en el solo quedemos tu y yo. Podrás llamarlo casualidad o destino, no lo sé, pero dudo que nos uniese el azar porque de casualidades no trata el amor. Y si mi corazón hoy habla con ilusión y sin razón, no pretendo asustarte con estas declaraciones ya que mis sentimientos hacia ti los desconozco y solo en el tiempo hallaremos la respuesta. Únicamente deseo acabar algún día como la primera vez que  nos encontremos, solos tú y yo, sin nadie más.